Un sabado del 88 hechando una moneda a la suerte, así comenzó nuestra vida en el Sur…
Nos conocimos en segundo año de la facultad estudiando para guías de turismo.
Viajando en un rastrajero a Bariloche de luna de miel, sin conocer y sin saber que era solo un viaje de ida, ese sábado caminando por la calle Mitre, encontramos una inmobiliaria abierta y nos dijimos «Si conseguimos donde quedarnos, nos quedamos». Con nuestros últimos ahorros y llave en mano nació nuestro primer hogar en bariloche.